Sus restos mortales fueron llevados ayer desde el panteón de sacerdotes del Cementerio Parroquial de Torrent, hasta la Iglesia de Santa María de Monte Vedat donde ya descansan
Torrent, 15/04/2024. Torrent ha celebrado este domingo diferentes actos en torno a la figura del sacerdote torrentino Juan Fernández Mora, fallecido en 2019 a los 92 años de edad. Sus restos mortales fueron llevados ayer desde el panteón de sacerdotes del Cementerio Parroquial de Torrent hasta la Iglesia de Santa María de Monte Vedat, donde ya descansan. Previamente, se celebró una Misa en acción de gracias por su sacerdocio, concelebrada por media docena de sacerdotes.
Tras enterrar a D. Juan en la antigua Ermita, se descubría la placa que desde ayer lleva el nombre de Plaça del Rector Juan Fernández Mora. Descubrieron la placa la Alcaldesa de la ciudad, Amparo Folgado junto a una sobrina de D. Juan y el párroco D. José Luis Viguer. La Alcaldesa quiso alabar la figura del homenajeado y contó diversas anécdotas personales, destacando el amor de D. Juan a Torrent, a la Iglesia y sus feligreses para quienes nunca dejó de pedir a todas las administraciones.
Los actos entorno a la figura de D. Juan estuvieron acompañados por el repique de campanas que ofrecieron los Mestres Campaners de Valencia y la Colla de Campaners de la Vall Blanca.
D. Juan Fernández Mora nació en Torrent el 6 de abril de 1926, en el seno de una familia humilde. Su infancia estuvo marcada por la adversidad, la pérdida de su hermano mayor en la Guerra Civil española y la detención de su madre por motivos religiosos. Estudió en el Convento de Monte-Sión y tomó la comunión en 1933. Ingresó en el Seminario Menor en 1939 y se ordenó sacerdote en 1950, en la Real Iglesia de El Salvador de Valencia.
Su servicio sacerdotal le llevó a Barx, Atzeneta d’Albaida, Ontinyent y finalmente a su localidad natal, Torrent, siendo el primer párroco de la Parroquia de San Juan Bosco.
En esta parroquia torrentina destacó por impulsar la construcción del nuevo templo de la Iglesia de Santa María de Monte Vedat, que se inauguró en 1995, por la compra de terrenos para poder trasladar la Parroquia de San Juan Bosco, de los locales de la Avenida al Vedat a la nueva ubicación, así como el Campamento Arciprestal de Torrent, en Benagéber.
