Torrent volvió a revivir este domingo uno de los momentos más esperados de las fiestas de Moros y Cristianos con la conquista de la Torre por parte del bando moro, en una espectacular recreación histórica cargada de pólvora, emoción y simbolismo.

El estruendo de los trabucos anunció el inicio de la primera trabucà del año, en la que el bando moro, liderado por el capitán Christian Triguero y su alférez Pau Bermell, avanzó con determinación desde Monte-Sión para hacerse con el control de la fortificación. Por su parte, el bando cristiano defendió con valentía la Torre desde el Raval.

Finalmente, el bando moro logró imponerse y, como marca la tradición, Christian Triguero ondeó la bandera mora desde lo alto de la Torre, proclamando la victoria para su ejército junto a su alférez Pau Bermell.

Pero la jornada no fue solo festiva. En uno de los momentos más emotivos del día, las comparsas y filaes rindieron un sentido homenaje póstumo a Diego Herreros, quien fuera Capitán Cristiano en 2008 por la Filà Contrabandistas. Un disparo de honor, acompañado por un respetuoso silencio y la presencia de familiares y amigos, llenó de emoción la Plaza Mayor. El instante más simbólico llegó cuando las hijas de Diego ofrecieron su trabuco a Nicko Magán, compañero de su misma filà, en un gesto cargado de recuerdos y afecto.

Las batallas no han terminado. Este lunes 28 de julio, a las 19 horas, está prevista la segunda trabucà, en la que el bando cristiano intentará recuperar la Torre, partiendo esta vez desde Monte-Sión. Con toda probabilidad, será la capitana cristiana Merce Mora, junto a su alférez Julio Palop, quien suba al castillo para proclamar la victoria cristiana y hacer ondear nuevamente la bandera de su bando, poniendo así el broche final a las teatralizadas luchas por el control de la Torre de Torrent de este 2025.