El tapiz floral, obra del florista Adrimar, estuvo dedicado a quienes ayudaron durante la emergencia del 29 de octubre
La ciudad de Torrent ha vivido este fin de semana una de sus festividades más solemnes, emotivas y tradicionales: el Corpus Christi. A pesar del intenso calor, cientos de torrentinos y torrentinas se han volcado en una celebración profundamente arraigada en la historia del municipio, que ha conjugado fe, cultura popular y participación ciudadana.
Desde la mañana del domingo 22 de junio, los actos litúrgicos y festivos se sucedieron con gran asistencia de público, comenzando con la misa solemne presidida por el Rvdo. D. Javier López Díaz, párroco de la parroquia Nuestra Señora del Dolor de Madrid. En la ceremonia, se nombraron a los nuevos clavarios para el año 2026, entre los que destacó la presencia del clavario mayor de este año, Javier Royo Barberá, quien ha desempeñado su papel con gran dedicación.
El tapiz floral: homenaje a la solidaridad ciudadana
Como cada año desde su recuperación en 2008, la instalación del tapiz floral en la Plaza Mayor, destacó este fin de semana. La obra ha estado a cargo del florista torrentino Adrimar, y ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Torrent y Caixa Rural Torrent.
El diseño del tapiz ha estado dedicado, de forma muy especial, a los voluntarios que participaron en las tareas de ayuda tras la DANA del pasado 29 de octubre, cuando Torrent y la comarca de l’Horta se vieron gravemente afectados por la barrancada. A través de flores naturales, arena de colores y un diseño cargado de simbolismo, se quiso rendir homenaje a todas las personas que ofrecieron su tiempo y esfuerzo de forma desinteresada para ayudar a sus vecinos en un momento crítico.
Una procesión cargada de simbolismo, participación, tradición y color
Tras la misa de la tarde con los niños y niñas que han recibido la Primera Comunión, y la tradicional enramà de la murta con carros típicos, dio comienzo uno de los actos más esperados: la Solemne Procesión del Santísimo Sacramento, en la que la Custodia recorrió las principales calles del centro histórico.
La procesión, presidida por los sacerdotes del Arciprestazgo Mare de Déu del Pòpul, la junta de la Obrería del Corpus, los clavarios, la corporación municipal y cientos de fieles, estuvo acompañada por salvas de honor y finalizó con una bendición solemne, reserva del Santísimo y un castillo de fuegos artificiales a cargo de Pirotecnia Germans Caballer.
Como cada año, participaron los personajes tradicionales del Corpus: La Moma, Els Nanos, Les Vetes, Els Arquets, Els Cavallets, Els Pastorets, La Degollà y La Magrana, que dieron vida a un cortejo lleno de simbolismo, colorido y alegría.
Gracias a la implicación del Grup de Ball l’U i Dos del Llar Antonià, estas danzas tradicionales siguen presentes año tras año, aportando al Corpus torrentino un valor cultural único.
Tradición con raíces medievales
El Corpus Christi en Torrent es una de las festividades religiosas más antiguas del municipio, con raíces que se remontan a la Edad Media. La implicación de la Obrería del Santísimo Sacramento, formada por más de 835 cofrades, ha sido clave para conservar esta tradición que forma parte del patrimonio inmaterial de la ciudad.
La alcaldesa Amparo Folgado, presente en todos los actos junto a miembros de la corporación municipal, quiso subrayar la relevancia de esta celebración: “El Corpus Christi no solo es una fiesta religiosa, es una expresión de la identidad de Torrent. Nos une como ciudad, nos conecta con nuestras raíces y nos recuerda que, en los momentos más difíciles, como ocurrió con la DANA, somos capaces de lo mejor como sociedad”.
Este lunes 23 de junio se celebra una última eucaristía en memoria de los cofrades difuntos, poniendo fin a una semana repleta de actos religiosos y culturales.









